¿Pueden lastimarme el nervio al hacer una endodoncia? Es una pregunta que escucho con frecuencia en mi despacho, mientras veo la angustia en los ojos de pacientes que acuden tras sufrir complicaciones inesperadas. Comprendo perfectamente ese temor, esa sensación de que algo salió mal en un procedimiento que debía ser rutinario. Si estás leyendo esto porque sientes un dolor persistente, entumecimiento o cualquier otra anomalía tras una endodoncia, quiero que sepas que no estás solo y que existen soluciones legales para tu situación.
¿Pueden lastimarme el nervio al hacer una endodoncia? Entendiendo los riesgos reales
La endodoncia, comúnmente conocida como «matar el nervio», es un procedimiento habitual en odontología que busca salvar dientes con infecciones o daños en su pulpa. Durante este tratamiento, el dentista debe trabajar con precisión milimétrica en espacios muy reducidos, próximos a estructuras nerviosas importantes. Y sí, existe un riesgo real de lesión nerviosa durante este procedimiento.
En mi experiencia como abogado especializado en negligencias odontológicas, he comprobado que muchos pacientes desconocen que la lesión nerviosa durante una endodoncia puede ocurrir incluso cuando el profesional actúa correctamente. Sin embargo, lo que marca la diferencia entre un riesgo asumible y una negligencia es la información previa, la técnica empleada y la respuesta ante las complicaciones.
Nervios que pueden verse afectados durante una endodoncia
Cuando hablamos de lesiones nerviosas en endodoncias, debemos distinguir principalmente:
- Nervio dentario inferior: Especialmente vulnerable en endodoncias de molares inferiores
- Nervio mentoniano: Puede afectarse en tratamientos de premolares inferiores
- Nervio lingual: Menos frecuente, pero con consecuencias potencialmente graves
- Nervio infraorbitario: En endodoncias de dientes superiores
Cada uno de estos nervios, al ser dañado, produce síntomas característicos que van desde el entumecimiento hasta dolores neuropáticos intensos y persistentes.
Señales de alarma: ¿Cómo saber si me han lesionado un nervio durante mi endodoncia?
Tras atender a cientos de pacientes con complicaciones post-endodoncia, he identificado ciertos síntomas que deberían encender todas las alarmas:
- Entumecimiento o pérdida de sensibilidad en labio, lengua, mejilla o encía que persiste más de 24 horas
- Sensación de hormigueo o «electricidad» que no remite con el tiempo
- Dolor agudo tipo «descarga eléctrica» que aparece al tocar ciertas zonas
- Sensación de quemazón persistente
- Alteración del gusto o sensación de «metal» en la boca
- Dolor que no responde a analgésicos convencionales
Lo que suelo recomendar a mis clientes en estos casos es documentar meticulosamente estos síntomas, incluyendo cuándo aparecieron exactamente tras el tratamiento, su intensidad y evolución. Esta información será crucial para cualquier reclamación posterior.
¿Pueden lastimarme el nervio al hacer una endodoncia por negligencia? Casos más frecuentes
No todas las lesiones nerviosas durante una endodoncia constituyen negligencia. Sin embargo, existen situaciones donde el daño sí puede atribuirse a una mala praxis:
Errores en la determinación de la longitud de trabajo
Uno de los casos más frecuentes que llegan a mi despacho involucra la sobreinstrumentación o la sobreobturación del conducto radicular. Cuando el odontólogo no determina correctamente la longitud del conducto, los instrumentos o materiales de obturación pueden sobrepasar el ápice radicular y dañar estructuras nerviosas adyacentes.
Omisión de pruebas radiológicas adecuadas
La falta de radiografías previas, durante y posteriores al tratamiento es una negligencia clara. Estas imágenes son fundamentales para:
- Identificar la anatomía radicular
- Determinar la proximidad a estructuras nerviosas
- Controlar la instrumentación y obturación
- Verificar el resultado final
Desde mi experiencia en casos relacionados con lesiones nerviosas durante endodoncias, insisto en que la ausencia de estas pruebas diagnósticas constituye una omisión grave que dificulta la defensa del profesional ante una complicación.
Uso de sustancias irritantes fuera del conducto
El hipoclorito de sodio y otros irrigantes utilizados durante la endodoncia pueden causar daños severos si se extravasan hacia los tejidos periapicales. Un profesional negligente puede:
- No utilizar dique de goma para aislar el diente
- Aplicar presión excesiva durante la irrigación
- No verificar la integridad del conducto antes de irrigar
¿Has sufrido una lesión nerviosa al hacer una endodoncia? Consejos legales que necesitas saber
Si sospechas que has sufrido una lesión nerviosa durante una endodoncia, estos son los pasos que debes seguir:
- Acude inmediatamente a un especialista (preferiblemente un neurólogo o un cirujano maxilofacial) para documentar el daño
- Solicita por escrito tu historia clínica completa a la clínica donde te realizaron la endodoncia
- Conserva todas las pruebas radiológicas (radiografías, TAC, resonancias) que te hayan realizado
- Guarda los informes de todos los especialistas que te hayan atendido tras la complicación
- No firmes ningún documento en la clínica sin asesoramiento legal previo
- Consulta con un abogado especializado en negligencias odontológicas antes de que transcurra un año desde el daño
En mi opinión como abogado especializado en negligencias odontológicas, el factor tiempo es crucial en estos casos. La legislación establece plazos de prescripción que, una vez superados, imposibilitan cualquier reclamación por muy evidente que sea el daño.
Aspectos legales sobre las lesiones nerviosas en endodoncias
El marco jurídico que ampara a los pacientes que han sufrido lesiones nerviosas durante endodoncias se fundamenta principalmente en:
- La Ley 41/2002 de Autonomía del Paciente, que garantiza el derecho a la información y al consentimiento informado
- Los artículos 1902 y siguientes del Código Civil, que regulan la responsabilidad extracontractual
- La Ley General de Sanidad, que establece el derecho a la protección de la salud
Un aspecto fundamental en estos casos es determinar si existió un consentimiento informado adecuado. Muchas clínicas utilizan formularios genéricos que no especifican los riesgos concretos de la endodoncia en cada caso particular, lo que puede invalidar legalmente dicho consentimiento.
¿Cuándo hay negligencia en una lesión nerviosa por endodoncia?
Para establecer que existió negligencia, debemos demostrar alguno de estos elementos:
- Ausencia de consentimiento informado específico
- Falta de pruebas diagnósticas previas adecuadas
- Error técnico durante el procedimiento
- Omisión de tratamiento ante los primeros síntomas de complicación
- Falta de derivación a un especialista cuando la situación lo requería
Veamos por qué este detalle puede cambiar tu caso: un simple entumecimiento post-endodoncia que no fue atendido correctamente puede derivar en un daño permanente que podría haberse evitado con una intervención temprana.
Indemnizaciones por lesiones nerviosas en endodoncias: ¿qué puedo reclamar?
Cuando se produce una lesión nerviosa durante una endodoncia, el paciente puede tener derecho a diferentes tipos de compensaciones:
- Daño emergente: Gastos médicos, tratamientos adicionales, medicación, etc.
- Lucro cesante: Pérdidas económicas por incapacidad laboral
- Daño moral: Sufrimiento psicológico, alteración de la calidad de vida
- Secuelas permanentes: Valoradas según baremos médicos oficiales
Aquí viene lo que no suelen contarte en consulta: las indemnizaciones por lesiones nerviosas permanentes tras endodoncias pueden oscilar entre los 10.000 y los 60.000 euros, dependiendo de la gravedad y las consecuencias para la vida diaria del paciente.
Casos reales de lesiones nerviosas durante endodoncias
A lo largo de mi carrera como abogado especializado en negligencias dentales, he representado a numerosos pacientes con lesiones nerviosas tras endodoncias. Algunos casos representativos (con detalles modificados para proteger la confidencialidad) incluyen:
Caso 1: Sobreinstrumentación en molar inferior
María acudió a una clínica dental para una endodoncia en el segundo molar inferior derecho. Tras el procedimiento, comenzó a sentir entumecimiento en el labio y mentón derechos. Las radiografías posteriores mostraron que la lima había sobrepasado el ápice radicular, lesionando el nervio dentario inferior. La clínica no realizó radiografías de control durante el procedimiento, lo que constituye una clara negligencia. Tras un proceso judicial, María recibió una indemnización de 28.000 euros por una parestesia permanente.
Caso 2: Extravasación de hipoclorito
Carlos experimentó un dolor intenso y repentino durante la irrigación con hipoclorito en una endodoncia. El dentista continuó el tratamiento sin atender a esta señal de alarma. En las horas siguientes, Carlos desarrolló un intenso edema facial y parestesias en la región inervada por el nervio infraorbitario. Se demostró que no se había utilizado dique de goma ni control adecuado de la presión durante la irrigación. El caso se resolvió con una indemnización de 22.000 euros.
¿Pueden lastimarme el nervio al hacer una endodoncia? Prevención y buenas prácticas
Como paciente, existen medidas que puedes tomar para minimizar el riesgo de sufrir una lesión nerviosa durante una endodoncia:
- Elige un profesional con experiencia demostrable en endodoncias
- Verifica que la clínica cuenta con equipamiento moderno (localizadores de ápice, radiografías digitales)
- Solicita información detallada sobre los riesgos específicos en tu caso
- Pregunta si es necesario un TAC previo para valorar la proximidad a estructuras nerviosas
- Asegúrate de que el consentimiento informado sea específico y detallado
¿Quieres saber por qué este paso es clave para tu protección? Un consentimiento informado adecuado no solo protege al profesional, sino que te garantiza conocer los riesgos reales y específicos de tu caso, permitiéndote tomar decisiones verdaderamente informadas.
Cómo ayudamos a víctimas de lesiones nerviosas en endodoncias
En NegligenciaMedica.Madrid, bajo mi dirección como abogado especializado, ofrecemos un enfoque integral para pacientes que han sufrido lesiones nerviosas durante endodoncias:
- Evaluación inicial gratuita del caso para determinar si existe base para una reclamación
- Recopilación y análisis de documentación médica, incluyendo historia clínica, radiografías y pruebas complementarias
- Coordinación con peritos médicos especializados en odontología y neurología para valorar el daño y establecer la relación causal
- Negociación directa con las aseguradoras de responsabilidad civil de las clínicas dentales
- Representación judicial completa en caso de no alcanzar un acuerdo extrajudicial satisfactorio
Nuestro objetivo es no solo conseguir la compensación económica que mereces, sino también ayudarte a obtener el tratamiento adecuado para mitigar, en la medida de lo posible, las secuelas de la lesión nerviosa.
Preguntas frecuentes sobre lesiones nerviosas en endodoncias
¿Pueden lastimarme el nervio al hacer una endodoncia incluso si el dentista actúa correctamente?
Sí, existe un riesgo inherente de lesión nerviosa incluso cuando el profesional actúa conforme a la lex artis. Sin embargo, este riesgo debe ser explicado previamente al paciente mediante un consentimiento informado específico. La diferencia entre un riesgo asumible y una negligencia radica en la técnica empleada, las precauciones tomadas y la respuesta ante las primeras señales de complicación.
¿Cuánto tiempo puede durar el entumecimiento después de una endodoncia antes de considerarlo anormal?
Cierto grado de entumecimiento es normal durante las primeras 24-48 horas tras una endodoncia, especialmente por el efecto de la anestesia. Sin embargo, si la sensación persiste más allá de este periodo, aumenta de intensidad o se acompaña de otros síntomas como dolor tipo descarga eléctrica o alteraciones del gusto, es fundamental consultar inmediatamente, ya que podría indicar una lesión nerviosa que requiere atención urgente.
¿Qué plazo tengo para reclamar por una lesión nerviosa durante una endodoncia?
El plazo general de prescripción para reclamaciones por responsabilidad civil es de un año desde que se conocen las secuelas definitivas de la lesión. Sin embargo, en casos de lesiones nerviosas, determinar cuándo se estabilizan las secuelas puede ser complejo, ya que algunas neuropatías evolucionan durante meses. Por ello, recomiendo consultar con un abogado especializado lo antes posible, incluso mientras se está en tratamiento, para evitar que prescriba la acción.
Conclusión: Protegiendo tus derechos ante lesiones nerviosas en endodoncias
¿Pueden lastimarme el nervio al hacer una endodoncia? Como hemos visto, la respuesta es afirmativa. Las lesiones nerviosas constituyen una complicación real que, en determinadas circunstancias, puede ser consecuencia de una negligencia profesional.
Si has experimentado síntomas como entumecimiento persistente, dolor neuropático o alteraciones sensoriales tras una endodoncia, es fundamental que busques tanto atención médica especializada como asesoramiento legal. En NegligenciaMedica.Madrid entendemos el impacto que estas lesiones pueden tener en tu calidad de vida y estamos comprometidos a luchar por tus derechos.
Recuerda que cada caso es único y requiere un análisis individualizado. No permitas que te convenzan de que tu dolor o molestias son «normales» o que «desaparecerán con el tiempo» si tu intuición te dice lo contrario. Tu salud y tu bienestar son prioritarios, y tienes derecho a recibir una atención odontológica que cumpla con los estándares profesionales.
Estoy a tu disposición para evaluar tu caso y ofrecerte la orientación legal que necesitas en este difícil momento. La primera consulta es gratuita y sin compromiso, porque creo firmemente que todos los pacientes merecen conocer sus derechos y opciones.
Abogado ejerciente del ICAM con más de 15 años de experiencia. Colegiado del Ilustre Colegio de Abogados de Madrid, colegiado número de colegiado 128.064. Especializado en Negligencias Médicas. Actual Director del bufete Ródenas Abogados y Asociados S.L.U. Licenciado en Derecho por la Universidad Instituto de Estudios Bursátiles (I.E.B.) con Máster de Acceso a la Abogacía.