¿Qué hacer si mi cirugía íntima empeoró mi vida sexual? Es una pregunta que escucho con más frecuencia de lo que imaginas en mi despacho. Entiendo perfectamente la frustración, el dolor y la sensación de traición que experimentas cuando una intervención que debía mejorar tu calidad de vida ha terminado convirtiéndose en una fuente de sufrimiento. Lo que debía ser una solución se ha transformado en un problema aún mayor, afectando no solo tu bienestar físico sino también tu intimidad y autoestima.
Te comprendo. Sé que hablar de este tema no es fácil y que probablemente has dudado mucho antes de buscar ayuda. Como abogado especializado en negligencias médicas y estéticas, he acompañado a numerosas personas que, como tú, han visto cómo una cirugía íntima ha deteriorado su vida sexual y, por ende, su calidad de vida general.
Consecuencias de una cirugía íntima fallida en la vida sexual
Cuando una persona decide someterse a una cirugía íntima, generalmente lo hace buscando mejorar su bienestar físico o emocional. Sin embargo, cuando el resultado es negativo, las consecuencias pueden ser devastadoras. Entre los problemas más frecuentes que he observado en mis clientes se encuentran:
- Dolor crónico durante las relaciones sexuales (dispareunia)
- Pérdida de sensibilidad en la zona genital
- Cicatrices dolorosas o antiestéticas
- Asimetrías evidentes
- Dificultad o imposibilidad para alcanzar el orgasmo
- Infecciones recurrentes
- Problemas de lubricación
- Estrechamiento excesivo del canal vaginal
¿Te suena familiar alguno de estos síntomas? Debes saber que no estás sola y que existen soluciones tanto médicas como legales para tu situación.
¿Qué hacer si mi cirugía íntima empeoró mi vida sexual? Primeros pasos esenciales
Si te encuentras en esta difícil situación, es fundamental que sigas una serie de pasos que te ayudarán tanto a recuperar tu salud como a proteger tus derechos:
1. Busca una segunda opinión médica especializada
Lo primero y más urgente es tu salud. Consulta con otro especialista, preferiblemente un ginecólogo con experiencia en reparaciones post-quirúrgicas. Este profesional podrá evaluar el daño causado y determinar si existe posibilidad de corrección quirúrgica o tratamiento alternativo.
En mi opinión como abogado especializado en negligencias estéticas, es crucial que este segundo especialista no pertenezca al mismo centro donde te realizaron la intervención original, para garantizar una valoración objetiva e imparcial.
2. Documenta exhaustivamente tu caso
Reúne toda la documentación relacionada con tu cirugía:
- Consentimiento informado firmado
- Informes preoperatorios
- Informe quirúrgico
- Fotografías antes y después (si las tienes)
- Informes de consultas posteriores
- Recetas de medicamentos prescritos
- Facturas de todos los gastos relacionados
Además, lleva un diario detallado de tus síntomas, dolores y cómo estos afectan a tu vida diaria y sexual. Este registro será muy valioso tanto para tu médico como para tu abogado.
Aspectos legales cuando una cirugía íntima deteriora tu vida sexual
Desde el punto de vista jurídico, una cirugía íntima que empeora tu vida sexual puede constituir un caso de negligencia médica si se demuestra que el profesional no actuó conforme a la lex artis (las buenas prácticas médicas). Aquí es donde entran en juego varios conceptos legales importantes:
El consentimiento informado: piedra angular de tu reclamación
El consentimiento informado no es un simple trámite burocrático. Es un documento fundamental donde el médico debe explicarte:
- En qué consiste exactamente la intervención
- Qué resultados reales puedes esperar
- Cuáles son los riesgos específicos
- Qué alternativas existen
- Qué complicaciones pueden surgir
Si no fuiste adecuadamente informada de los riesgos que podían afectar tu vida sexual, existe base para una reclamación, incluso si técnicamente la cirugía se realizó correctamente.
Lo que suelo recomendar a mis clientes en estos casos es revisar minuciosamente el consentimiento informado. Muchas veces encontramos que estos documentos son genéricos, incompletos o no mencionan específicamente los riesgos relacionados con la función sexual.
¿Has sufrido consecuencias porque tu cirugía íntima empeoró tu vida sexual? Consejos legales que necesitas saber
Si tu cirugía íntima ha tenido un impacto negativo en tu vida sexual, estos son los pasos legales que debes seguir:
1. Actúa dentro del plazo legal
Es fundamental que sepas que el plazo para interponer una reclamación por negligencia médica es de un año desde que se producen las secuelas definitivas o desde que termina el proceso asistencial, según establece el artículo 1968.2 del Código Civil. No dejes pasar el tiempo, pues podrías perder tu derecho a reclamar.
2. Reúne pruebas periciales
Para demostrar la relación causa-efecto entre la cirugía y el deterioro de tu vida sexual, necesitarás:
- Informes médicos de especialistas que confirmen el daño
- Peritaje médico-legal que establezca la mala praxis
- Evaluación psicológica que determine el impacto emocional
La carga de la prueba recae principalmente en ti como paciente, por lo que estos informes son cruciales para el éxito de tu reclamación.
3. Determina contra quién reclamar
Dependiendo de las circunstancias, podrías reclamar contra:
- El cirujano que realizó la intervención
- La clínica o centro médico
- La aseguradora del profesional o centro
- El servicio público de salud (si la intervención fue en la sanidad pública)
Aquí viene lo que nadie te cuenta: en muchos casos, es estratégicamente más efectivo dirigir la reclamación contra todos los posibles responsables, para evitar que se diluyan responsabilidades.
Tipos de compensación a los que puedes tener derecho si tu cirugía íntima empeoró tu vida sexual
Cuando una cirugía íntima deteriora tu vida sexual, puedes tener derecho a diferentes tipos de indemnización:
Daños patrimoniales
- Daño emergente: Todos los gastos médicos derivados de la mala praxis (cirugías reparadoras, tratamientos, medicamentos, terapias)
- Lucro cesante: Ingresos dejados de percibir por bajas laborales o incapacidad
Daños extrapatrimoniales
- Daño moral: Sufrimiento psicológico, angustia, depresión
- Daño a la vida de relación: Deterioro de las relaciones de pareja y sociales
- Pérdida de calidad de vida: Limitaciones en tu vida cotidiana y sexual
Veamos por qué este detalle marca la diferencia: el daño a la vida sexual es considerado por los tribunales como un daño grave que merece una indemnización sustancial, especialmente cuando afecta a personas jóvenes o en edad reproductiva.
Opciones de tratamiento médico cuando una cirugía íntima ha empeorado tu vida sexual
Paralelamente a la vía legal, es fundamental abordar el aspecto médico para intentar recuperar, en la medida de lo posible, tu salud sexual:
Cirugía reparadora
En algunos casos, una cirugía correctiva realizada por un especialista experimentado puede revertir parte del daño. Es importante que este nuevo cirujano sea ajeno al que realizó la primera intervención y tenga experiencia específica en reparaciones post-quirúrgicas.
Fisioterapia del suelo pélvico
La fisioterapia especializada puede ayudar a:
- Reducir el dolor durante las relaciones
- Mejorar la elasticidad de los tejidos
- Fortalecer la musculatura pélvica
- Recuperar parte de la sensibilidad perdida
Terapia sexual y psicológica
El impacto emocional de una cirugía íntima fallida puede ser tan devastador como el físico. La terapia psicológica y sexológica te ayudará a:
- Procesar el trauma
- Recuperar la confianza en tu cuerpo
- Desarrollar nuevas formas de intimidad
- Mejorar la comunicación con tu pareja
¿Quieres saber por qué esto es tan importante? Porque la recuperación integral debe abordar tanto el aspecto físico como el psicológico, y ambos deben ser considerados en tu reclamación legal.
El impacto psicológico cuando una cirugía íntima deteriora tu vida sexual
El deterioro de la vida sexual tras una cirugía íntima no solo afecta al plano físico, sino que tiene profundas implicaciones psicológicas:
- Pérdida de autoestima y confianza
- Ansiedad anticipatoria ante las relaciones sexuales
- Depresión
- Problemas de pareja
- Aislamiento social
- Trastornos del sueño
- Sentimientos de culpa o vergüenza
Desde mi perspectiva como letrado con experiencia en casos donde la cirugía íntima ha empeorado la vida sexual de mis clientes, este daño psicológico debe ser documentado por profesionales y cuantificado adecuadamente en la reclamación, pues constituye una parte sustancial del perjuicio sufrido.
Casos reales: Cuando una cirugía íntima deteriora la vida sexual
Para ilustrar mejor las situaciones que pueden darse, te comparto algunos casos representativos (con nombres ficticios) que he manejado en mi despacho:
El caso de Marta: labioplastia con pérdida de sensibilidad
Marta, de 32 años, se sometió a una labioplastia por motivos estéticos. Tras la intervención, experimentó una pérdida casi total de sensibilidad en la zona, lo que le imposibilitaba alcanzar el orgasmo. El cirujano había seccionado terminaciones nerviosas importantes sin informarle previamente de este riesgo. Conseguimos una indemnización de 45.000€ basándonos en la falta de consentimiento informado adecuado y el daño permanente a su función sexual.
El caso de Elena: vaginoplastia excesivamente restrictiva
Elena, de 41 años, tras tres partos, decidió someterse a una vaginoplastia. El cirujano realizó un estrechamiento excesivo que le provocaba dolor intenso durante las relaciones sexuales. A pesar de múltiples revisiones, el médico insistía en que era normal y que «se adaptaría con el tiempo». Tras dos cirugías correctivas y terapia, Elena seguía experimentando dolor. La reclamación se resolvió con una indemnización de 38.000€ por mala praxis y seguimiento inadecuado.
Cómo te ayudamos en NegligenciaMedica.Madrid si tu cirugía íntima empeoró tu vida sexual
En NegligenciaMedica.Madrid entendemos la complejidad y sensibilidad de estos casos. Nuestro enfoque se basa en tres pilares fundamentales:
Asesoramiento jurídico personalizado
Cada caso es único, por eso realizamos un análisis exhaustivo de tu situación particular, evaluando la documentación médica, el consentimiento informado y las secuelas específicas que has sufrido. Te ofrecemos una valoración honesta sobre las posibilidades de éxito de tu reclamación.
Enfoque integral
Trabajamos con un equipo multidisciplinar que incluye peritos médicos especializados en ginecología y cirugía plástica, así como psicólogos expertos en trauma sexual. Esta visión integral nos permite construir casos sólidos que contemplen todas las dimensiones del daño sufrido.
Acompañamiento durante todo el proceso
Entendemos que revivir lo sucedido puede ser doloroso, por eso te acompañamos en cada paso del proceso, desde la recopilación inicial de documentación hasta la resolución final, ya sea mediante acuerdo extrajudicial o sentencia.
Nuestro objetivo es doble: conseguir la compensación económica que mereces y contribuir a tu proceso de sanación, facilitando el acceso a los mejores especialistas para tu recuperación física y emocional.
Preguntas frecuentes sobre qué hacer si mi cirugía íntima empeoró mi vida sexual
¿Cuánto tiempo tengo para reclamar si mi cirugía íntima empeoró mi vida sexual?
Dispones de un año desde que se producen las secuelas definitivas o desde que finaliza el proceso asistencial completo. Es importante no demorar la consulta con un abogado especializado, ya que la preparación de la reclamación requiere tiempo para reunir informes y pruebas.
¿Qué hacer si mi cirugía íntima empeoró mi vida sexual pero firmé un consentimiento informado?
Firmar un consentimiento informado no impide reclamar si: 1) El documento no detallaba específicamente los riesgos relacionados con la función sexual, 2) El médico no te explicó verbalmente estos riesgos de forma comprensible, 3) Se produjo un error técnico durante la intervención, o 4) No se siguieron los protocolos adecuados en el postoperatorio.
¿Puedo reclamar si la cirugía íntima fue por motivos estéticos y no médicos?
Absolutamente. En las cirugías estéticas, la jurisprudencia tiende a ser incluso más exigente con los profesionales, considerando que existe un compromiso de resultado y no solo de medios. Si tu vida sexual se ha visto perjudicada tras una cirugía íntima estética, tienes pleno derecho a reclamar por los daños sufridos.
Conclusión: Recupera tu vida sexual y obtén la compensación que mereces
Si tu cirugía íntima ha empeorado tu vida sexual, es fundamental que sepas que no estás sola y que existen soluciones tanto médicas como legales para tu situación. El camino puede parecer abrumador, pero con el apoyo adecuado, es posible recuperar no solo una compensación económica justa, sino también, en muchos casos, parte de la calidad de vida perdida.
En NegligenciaMedica.Madrid entendemos el profundo impacto que este tipo de negligencias tiene en todas las dimensiones de tu vida. Nuestro compromiso es acompañarte en este proceso con sensibilidad, profesionalidad y determinación, luchando por tus derechos y contribuyendo a tu proceso de sanación.
No permitas que una mala praxis médica defina tu futuro. Dar el primer paso contactando con profesionales especializados es el comienzo de tu camino hacia la recuperación y la justicia. Recuerda que buscar ayuda no solo es un derecho, sino un acto de valentía y autocuidado que mereces.
Abogado ejerciente del ICAM con más de 15 años de experiencia. Colegiado del Ilustre Colegio de Abogados de Madrid, colegiado número de colegiado 128.064. Especializado en Negligencias Médicas. Actual Director del bufete Ródenas Abogados y Asociados S.L.U. Licenciado en Derecho por la Universidad Instituto de Estudios Bursátiles (I.E.B.) con Máster de Acceso a la Abogacía.