Cada semana atiendo a familias devastadas por casos de preeclampsia grave no detectada a tiempo. Sus historias siguen un patrón dolorosamente similar: síntomas ignorados, controles rutinarios que no detectaron señales de alarma y profesionales que minimizaron las quejas. ¿Por qué no se detectan preeclampsias graves a tiempo? Esta pregunta me la plantean constantemente madres que han sufrido complicaciones severas que podrían haberse evitado. Entiendo perfectamente tu frustración y preocupación si estás leyendo esto porque tú o alguien cercano ha pasado por esta situación. Te aseguro que no estás solo/a y que existen caminos legales para obtener respuestas y compensación.
La preeclampsia grave no detectada: un problema más común de lo que pensamos
La preeclampsia es un trastorno hipertensivo del embarazo que afecta aproximadamente al 5-8% de las gestantes. Sin embargo, lo verdaderamente alarmante es que en muchos casos su forma grave pasa desapercibida hasta que se producen complicaciones serias tanto para la madre como para el bebé.
En mi experiencia como abogado especializado en negligencias médicas en Ginecología y Obstetricia, he observado que muchos de estos casos comparten factores comunes que explican por qué no se detectan a tiempo:
- Controles prenatales espaciados o superficiales
- Falta de seguimiento adecuado en pacientes con factores de riesgo
- Interpretación errónea de síntomas de alarma
- Sobrecarga asistencial que limita el tiempo de consulta
- Deficiente comunicación entre profesionales sanitarios
¿Te resulta familiar alguno de estos puntos? Sigue leyendo porque vamos a profundizar en cada uno de ellos.
¿Por qué no se detectan preeclampsias graves a tiempo? Factores determinantes
Después de analizar decenas de casos, he identificado varios factores clave que explican por qué esta grave complicación pasa desapercibida hasta que es demasiado tarde:
Fallos en el protocolo de seguimiento prenatal
Los protocolos médicos establecen claramente cómo debe realizarse el seguimiento de una embarazada, especialmente si presenta factores de riesgo para preeclampsia. Sin embargo, en muchos casos que he representado, estos protocolos no se siguieron correctamente:
- No se realizaron todas las pruebas recomendadas en cada visita
- No se programaron visitas adicionales ante síntomas sospechosos
- Se omitieron análisis específicos para detectar marcadores de preeclampsia
Aquí viene lo que nadie te cuenta… Incluso en centros sanitarios de prestigio, la presión asistencial puede llevar a que las consultas prenatales se conviertan en meros trámites de minutos, donde apenas hay tiempo para una evaluación exhaustiva.
Minimización de síntomas reportados por la paciente
Ana, una de mis clientas, acudió tres veces a urgencias por dolores de cabeza intensos y visión borrosa durante su tercer trimestre. En las tres ocasiones fue enviada a casa con un diagnóstico de «ansiedad gestacional». Dos días después sufrió una eclampsia que derivó en un desprendimiento de placenta, poniendo en riesgo su vida y la de su bebé.
Este caso ilustra un problema recurrente: la tendencia a minimizar o normalizar síntomas que podrían indicar una preeclampsia grave. Síntomas como:
- Dolores de cabeza persistentes
- Alteraciones visuales
- Dolor en la parte superior del abdomen
- Hinchazón repentina y severa
Son frecuentemente atribuidos a las molestias normales del embarazo, cuando en realidad pueden ser señales de alarma de una preeclampsia que está evolucionando hacia formas graves.
Errores diagnósticos frecuentes: ¿Por qué los médicos no detectan la preeclampsia grave?
Veamos por qué este detalle marca la diferencia… El diagnóstico de la preeclampsia requiere una combinación de vigilancia clínica y pruebas específicas. Los errores más comunes que he documentado en mis casos incluyen:
Interpretación incorrecta de los valores de tensión arterial
Un incremento de 30 mmHg en la presión sistólica o de 15 mmHg en la diastólica respecto a los valores basales de la paciente debería generar sospecha, incluso si los valores absolutos no superan el umbral de 140/90 mmHg. Sin embargo, muchos profesionales solo consideran preocupantes las cifras que superan este umbral, ignorando incrementos significativos en mujeres que normalmente tienen tensiones bajas.
En mi opinión como abogado especializado en negligencias médicas en Ginecología y Obstetricia, este es uno de los errores más graves y frecuentes, pues ignora la variabilidad individual de cada paciente.
No valoración conjunta de síntomas y pruebas analíticas
La preeclampsia grave no siempre se presenta con un cuadro clínico completo y evidente. A menudo, es la combinación de pequeñas alteraciones lo que debería encender las alarmas:
- Ligero aumento de la tensión arterial + proteinuria leve
- Edemas + alteraciones en las pruebas hepáticas
- Dolor epigástrico + trombocitopenia leve
Cuando estos signos se evalúan de forma aislada, pueden parecer poco significativos. Es su valoración conjunta la que permite identificar una preeclampsia que está evolucionando hacia formas graves.
Consecuencias devastadoras de la preeclampsia grave no detectada a tiempo
¿Quieres saber por qué esto es tan importante? Las consecuencias de no detectar una preeclampsia grave a tiempo pueden ser devastadoras:
Para la madre
- Eclampsia: convulsiones que pueden provocar daño cerebral permanente
- Síndrome HELLP: complicación potencialmente mortal que afecta al hígado y la coagulación
- Insuficiencia renal aguda: que puede requerir diálisis temporal o permanente
- Edema pulmonar: acumulación de líquido en los pulmones que dificulta la respiración
- Accidente cerebrovascular: con posibles secuelas neurológicas permanentes
- Coagulación intravascular diseminada: trastorno grave de la coagulación
Para el bebé
- Restricción del crecimiento intrauterino: con posibles consecuencias a largo plazo
- Prematuridad: con todos los riesgos asociados
- Sufrimiento fetal: que puede provocar daño cerebral por hipoxia
- Muerte fetal intrauterina: en los casos más graves
El caso de María ilustra estas consecuencias. A sus 32 años, en su primer embarazo, presentó hinchazón severa y dolores de cabeza que fueron considerados «normales». Cuando finalmente se diagnosticó su preeclampsia grave, ya había desarrollado un síndrome HELLP que requirió una cesárea de emergencia a las 30 semanas. Su bebé pasó dos meses en la UCI neonatal y ella sufrió daño renal que limitó su función renal al 60%.
¿Por qué no se detectan preeclampsias graves a tiempo? Fallos en el sistema sanitario
Más allá de los errores individuales, existen problemas estructurales en nuestro sistema sanitario que contribuyen a que la preeclampsia grave no se detecte a tiempo:
Sobrecarga asistencial y falta de tiempo
Las consultas prenatales suelen estar programadas para durar entre 10 y 15 minutos, un tiempo insuficiente para realizar una evaluación completa, especialmente en pacientes con factores de riesgo. Esta presión asistencial lleva a que muchos profesionales se centren únicamente en los parámetros básicos, sin profundizar en síntomas sutiles o en la valoración integral de la paciente.
Fragmentación de la atención
En muchos centros, la embarazada es atendida por diferentes profesionales a lo largo de su gestación, lo que dificulta el seguimiento continuado y la detección de cambios significativos. Un profesional que ve a la paciente por primera vez puede considerar «normal» un valor que, comparado con sus registros previos, representaría una alteración importante.
Deficiencias en la formación continua
Los criterios diagnósticos y terapéuticos de la preeclampsia han evolucionado significativamente en los últimos años. Sin embargo, no todos los profesionales están actualizados respecto a los nuevos protocolos y recomendaciones, lo que puede llevar a que sigan criterios obsoletos para la valoración del riesgo.
¿Has sufrido una preeclampsia grave no detectada a tiempo? Consejos legales que necesitas saber
Si tú o un familiar habéis sufrido complicaciones graves debido a una preeclampsia no detectada a tiempo, estos son los pasos que debes seguir:
- Solicita tu historia clínica completa. Tienes derecho a acceder a toda la documentación relacionada con tu atención médica durante el embarazo, parto y posparto.
- Documenta todo. Anota fechas, síntomas reportados, respuestas recibidas y nombres de los profesionales que te atendieron.
- Busca una segunda opinión médica. Un informe de otro especialista puede ayudar a determinar si hubo negligencia.
- No dejes pasar el tiempo. El plazo para reclamar es de un año desde que se estabilizan las secuelas.
- Consulta con un abogado especializado. La complejidad de estos casos requiere experiencia específica en negligencias obstétricas.
Lo que suelo recomendar a mis clientes en estos casos es que no se precipiten en firmar acuerdos con aseguradoras sin antes haber valorado adecuadamente el alcance de las secuelas y las necesidades futuras, especialmente cuando hay daños permanentes.
Responsabilidad médica en casos de preeclampsia grave no detectada
Desde el punto de vista legal, para que exista responsabilidad médica deben concurrir varios elementos:
- Una actuación médica que no cumpla con la lex artis (buena práctica médica)
- Un daño objetivo y demostrable
- Una relación de causalidad entre la actuación médica y el daño
En los casos de preeclampsia grave no detectada, la responsabilidad suele derivarse de:
Omisión de pruebas diagnósticas indicadas
Cuando existen factores de riesgo o síntomas sugestivos de preeclampsia, el estándar de cuidado exige realizar determinadas pruebas como análisis de proteinuria, pruebas de función hepática o control del bienestar fetal. La omisión de estas pruebas puede constituir negligencia.
Falta de seguimiento adecuado
Las pacientes con factores de riesgo para preeclampsia requieren un seguimiento más estrecho. No programar controles más frecuentes en estos casos puede ser considerado una desviación del estándar de cuidado.
Retraso en el tratamiento
Una vez detectados signos de preeclampsia, el retraso en implementar medidas terapéuticas adecuadas (como la administración de sulfato de magnesio o la finalización del embarazo en casos graves) puede generar responsabilidad si deriva en complicaciones evitables.
Cómo ayudamos a las víctimas de preeclampsia grave no detectada
En NegligenciaMedica.Madrid, bajo mi dirección como abogado especializado, ofrecemos un enfoque integral para ayudar a las familias afectadas por casos de preeclampsia grave no detectada a tiempo:
Asesoramiento jurídico personalizado: Evaluamos cada caso de forma individual, analizando la historia clínica y consultando con peritos médicos para determinar si existió negligencia en la detección y manejo de la preeclampsia.
Reclamación ante el Hospital Público o Privado: Gestionamos todo el proceso de reclamación, ya sea ante la administración pública o frente a centros privados y sus aseguradoras, buscando siempre la máxima compensación por los daños sufridos.
Obtención de indemnización judicial o extrajudicial: Trabajamos para conseguir una compensación justa que cubra no solo los daños actuales sino también las necesidades futuras, especialmente en casos con secuelas permanentes para la madre o el bebé.
Preguntas frecuentes sobre preeclampsia grave no detectada a tiempo
¿Por qué no se detectan preeclampsias graves a tiempo si existen protocolos claros?
A pesar de existir protocolos bien definidos, la detección temprana falla principalmente por tres motivos: sobrecarga asistencial que limita el tiempo de evaluación, interpretación errónea de síntomas iniciales que se confunden con molestias normales del embarazo, y falta de seguimiento personalizado que impide detectar cambios significativos en cada paciente particular.
¿Qué indemnización puedo reclamar si he sufrido complicaciones por una preeclampsia grave no detectada a tiempo?
La indemnización dependerá de diversos factores: gravedad de las secuelas, necesidad de tratamientos futuros, impacto en la calidad de vida, afectación a la capacidad laboral, daños al bebé, y daño moral. En casos graves con secuelas permanentes para la madre o el bebé, las indemnizaciones pueden superar los 500.000 euros, mientras que en casos con recuperación completa pero sufrimiento temporal, suelen oscilar entre 30.000 y 100.000 euros.
¿Cuáles son los signos de alarma de preeclampsia grave que los médicos deberían identificar?
Los profesionales sanitarios deberían estar alerta ante: tensión arterial igual o superior a 160/110 mmHg, proteinuria significativa (más de 300 mg en 24 horas), dolor epigástrico o en hipocondrio derecho, alteraciones visuales como visión borrosa o destellos, dolor de cabeza intenso que no responde a analgésicos habituales, edema pulmonar, alteraciones en pruebas hepáticas o renales, y disminución del recuento de plaquetas. La presencia de cualquiera de estos signos requiere una evaluación urgente.
Conclusión: La importancia de la detección temprana y tus derechos
La pregunta ¿por qué no se detectan preeclampsias graves a tiempo? tiene múltiples respuestas, desde fallos individuales hasta problemas estructurales del sistema sanitario. Lo que resulta innegable es que estas omisiones pueden tener consecuencias devastadoras para madres y bebés.
Como abogado especializado en estos casos, he visto cómo muchas familias han tenido que enfrentar secuelas físicas, emocionales y económicas que podrían haberse evitado con una atención adecuada. Sin embargo, también he comprobado cómo el sistema legal puede proporcionar no solo una compensación económica, sino también un reconocimiento del daño sufrido y los recursos necesarios para afrontar el futuro.
Si tú o un ser querido habéis pasado por esta situación, es fundamental que conozcáis vuestros derechos y las opciones legales disponibles. No estáis solos en este camino. Con el asesoramiento adecuado, podéis obtener la justicia y la compensación que merecéis mientras contribuís a que el sistema sanitario mejore y evite que otras familias pasen por la misma experiencia.
Abogado ejerciente del ICAM con más de 15 años de experiencia. Colegiado del Ilustre Colegio de Abogados de Madrid, colegiado número de colegiado 128.064. Especializado en Negligencias Médicas. Actual Director del bufete Ródenas Abogados y Asociados S.L.U. Licenciado en Derecho por la Universidad Instituto de Estudios Bursátiles (I.E.B.) con Máster de Acceso a la Abogacía.